El lanzamiento del modelo GPT-5 de OpenAI ha generado un mar de opiniones divididas. Desde quejas sobre su tono más frío hasta cuestionamientos sobre su creatividad, la comunidad no ha dejado de hablar. Tanto ha sido el revuelo que OpenAI decidió reintroducir GPT-4o como opción para calmar los ánimos.
Pero, ¿qué tan diferente es realmente el nuevo modelo? Nos dimos a la tarea de comparar ambos en una serie de pruebas que reflejan el uso actual de estos asistentes de inteligencia artificial. No se trata de un análisis exhaustivo, pero sí de una mirada cercana a cómo estos modelos pueden variar en estilo y sustancia.
La primera prueba fue simple: escribir cinco chistes de papá originales. GPT-5, a pesar de prometer chistes ‘directos de la fábrica de juegos de palabras’, optó por algunos bastante conocidos. Aunque bien ejecutados, dejaron que desear en originalidad. Por otro lado, GPT-4o mezcló chistes viejos con intentos fallidos de originalidad, como un bote que funciona con quejas en lugar de vino. Estos resultados nos hacen preguntarnos: ¿es la innovación siempre sinónimo de mejora? En el mundo de la IA, parece que no siempre.
La creatividad y la capacidad de sorprender son cualidades que, al menos por ahora, siguen siendo un desafío incluso para los modelos más avanzados. Al final, la elección entre GPT-5 y GPT-4o podría reducirse a preferencias personales. ¿Prefieres la seguridad de lo conocido o te aventuras con lo nuevo, a pesar de sus posibles fallas? La respuesta, como en muchas cosas de la vida, no es blanca ni negra.





