Oye, ¿sabías que la inteligencia artificial está revolucionando la programación? ¡Y no siempre para bien! Un desarrollador contó cómo usar la IA para programar le hizo sentir, primero, como si tuviera superpoderes. ¡Código al instante! Pero después… ¡zas! Se dio cuenta de que se estaba volviendo más flojo y menos chingón programando. Resulta que empezó a depender demasiado de la IA para generar código, sin entender a fondo lo que estaba haciendo. Al principio, todo era color de rosa: una herramienta que lo hacía más productivo, resolviendo tareas en minutos en lugar de horas. Pero la comodidad trajo consecuencias inesperadas.

El problema no fue que la IA fuera mala, sino que él dejó de pensar. Cada línea de código que generaba la IA, aunque funcionara, lo alejaba de la comprensión profunda del sistema que estaba construyendo. Es como usar una calculadora para sumar 2 + 2: ¡funciona!, pero ¿para qué aprender la suma si la máquina lo hace por ti? Se dio cuenta de que estaba acumulando una “deuda cognitiva”, dejando sin resolver decisiones importantes de diseño y arquitectura, lo que se convertiría en un verdadero dolor de cabeza en el futuro. Además, la IA introdujo errores de seguridad que él no detectó hasta la revisión del código, mostrando su dependencia y la falta de habilidades para auditar el código generado.

La moraleja de esta historia es que la IA es una herramienta poderosa, pero no nos puede reemplazar por completo. Si la usamos sin precaución, corremos el riesgo de volvernos dependientes y perder nuestras habilidades. Es como un piloto que solo confía en el piloto automático: ¿qué pasa si falla el sistema? La clave está en el equilibrio: usar la IA para apoyarnos, para automatizar tareas repetitivas, pero sin perder nuestra capacidad de razonamiento crítico y nuestra capacidad de construir y auditar un buen código. Así que, aunque la IA parezca un atajo mágico, recordemos que la verdadera magia está en la comprensión y el dominio de la programación. ¿Qué opinas, usamos o no la IA sin volvernos unos flojos?